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If you have ever been to Alicante, you have probably already been to Postiguet beach. What makes this beach unique is its view of Santa Bárbara Castle, but have you ever observed the rock on which it is built? Have you seen that face in profile that hides there? Do you know its legend?
The city of Alicante has a history of 3000 years. This Roman city passed under the Moorish domination in 718. During the Christian conquest (5 centuries later), it was placed under the protectorate of the Kingdom of Castile and in 1296, it passed into the hands of the Kingdom of Aragon. This city has known different influences which make its history rich. Today we are going to focus on its most famous legend : la Cara del Moro (the face of the Moor) .
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La Cara del Moro
Centuries ago, Alicante was dominated by the Moors. The caliph who ruled over Alicante lived in Santa Bárbara Castle with his family, including his daughter Cántara. The princess was the most beautiful woman in the region and was very courted. Her father decided to organize a party to which her suitors were invited. Two young men stood out. On the one hand, Almanzor, general of Córdoba whose reputation was well established. On the other side, Alí, a young man, noble and handsome.
The caliph decided that destiny would decide to whom he would give his daughter’s hand. He gave the two men a mission and whoever fulfilled it first would marry his daughter. Alí was to bring water from Tibi to the castle through a long and strong irrigation canal, while Almanzor was to sail to India and bring back spices.
The two men began their mission, but Alí was distracted by the princess with whom he was beginning to form a strong bond. They soon fell in love and imagined their future together. Alí was so involved in their story that he forgot to fulfill his task. When Almanzor returned from India having accomplished his mission, the caliph kept his word and gave Almanzor his blessing to marry his daughter.
Alí, heartbroken, jumped into a ravine to take his own life. When Cántara heard about it, she was so desperate that she did the same. She jumped from the hill of San Julián. The caliph was very saddened by the loss of his beloved daughter and quickly fell into depression. Soon after, he died of grief and his distressed face appeared on the side of Mount Benancantil.
The legend says that the inhabitants were touched by this tragic love story. Therefore, they decided to reunite the two lovers forever by changing the name of the city to Alcántara, which would later become Alicante.
Restoration
The Cara del Moro is a symbol of Alicante, hence the importance to preserve it. In 2008, the City Council paid 300.000 euros to a georestoration company to repair the cracks on the slopes of the castle and the Cara del Moro. For this restoration, a scaffolding 36 meters high and 27 meters wide was necessary.
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La Cara del Moro : la famosa leyenda de Alicante
Si ha estado alguna vez en Alicante, probablemente ya haya estado en la playa del Postiguet. Esta playa es única por sus vistas al Castillo de Santa Bárbara, pero ¿has observado alguna vez la roca sobre la que está construido? ¿Has visto la cara de perfil que allí se esconde? ¿Y conoce su leyenda?
La ciudad de Alicante tiene una historia de 3000 años. Esta ciudad romana pasó bajo la dominación árabe en el año 718. Durante la conquista cristiana (5 siglos después), quedó bajo el protectorado del Reino de Castilla y en 1296, pasó a manos del Reino de Aragón. Esta ciudad ha conocido diferentes influencias que hacen que su historia sea rica. Hoy vamos a interesarnos por su leyenda más famosa: la Cara del Moro.
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La Cara del Moro
Hace siglos, Alicante estaba dominada por los Moros. El califa que gobernaba Alicante vivía en el Castillo de Santa Bárbara con su familia, incluida su hija Cántara. La princesa era la mujer más bella de la región y era muy cortejada. Su padre decidió organizar una fiesta a la que fueron invitados sus pretendientes. Dos jóvenes destacaron. Por un lado, Almanzor, general de Córdoba cuya reputación estaba bien establecida. Por otro, Alí, un joven noble y apuesto.
El califa decidió que el destino decidiría a quién daría la mano de su hija. Dio a los dos hombres una misión y quien la cumpliera primero se casaría con su hija. Alí debía llevar agua desde Tibi hasta el castillo a través de un largo y fuerte canal de riego, mientras que Almanzor debía navegar hasta la India y traer especias.
Los dos hombres comenzaron su misión, pero Alí se distrajo con la princesa, con la que empezaba a formar un fuerte vínculo. Pronto se enamoraron e imaginaron su futuro juntos. Alí estaba tan involucrado en su historia que se olvidó de cumplir su tarea. Cuando Almanzor regresó de la India habiendo cumplido su misión, el califa cumplió su palabra y le dio su bendición para casarse con su hija.
Alí, desconsolado, se tiró a un barranco para quitarse la vida. Cuando Cántara se enteró, estaba tan desesperada que hizo lo mismo. Saltó desde la colina de San Julián. El califa se entristeció mucho por la pérdida de su amada hija y rápidamente cayó en depresión. Poco después, murió de pena y su rostro afligido apareció en la ladera del monte Benancantil.
La leyenda cuenta que los habitantes se conmovieron con esta trágica historia de amor. Por ello, decidieron reunir a los dos amantes para siempre cambiando el nombre de la ciudad por el Alcántara, que acabaría derivando con el paso del tiempo en Alicante.
Restauración
La Cara del Moro es un símbolo de Alicante, de ahí la importancia de conservarla. En 2008, el Ayuntamiento pagó 300.000 euros a una empresa de georrestauración para reparar las grietas de las laderas del castillo y de la Cara del Moro. Para esta restauración fue necesario un andamio de 36 metros de alto y 27 de ancho.
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